Antoni Castel es doctor en psicología y ocupa la plaza titular de su especialidad en La Unidad de Dolor del Hospital Universitari Joan XXIII junto con cuyo equipo es autor de diversas investigaciones en el uso de la hipnosis en el dolor crónico en fibromialgia y por los que han recibido reconocimientos como el Premio Fundación Grunenthal, otorgado por la Cátedra del Dolor de la Universidad de Salamanca en el trabajo publicado en el European Journal of Pain 2007; 11: 463-8. «Effect of Hypnotic suggestion on fibromyalgic pain: Comparison between Hypnosis and relaxation».

En marzo de 2012 se publicaron los resultados de la investigación «Terapia de grupo cognitivo-conductual multicomponente con hipnosis en el tratamiento de la fibromialgia: resultados a largo plazo» en la prestigiosa revista ‘The Journal of Pain’ editada por la American Pain Society. Con este motivo entrevistamos a Antoni Castel que ha tendido la gentileza de responder nuestras preguntas.

#1. Enhorabuena Antoni por su trabajo. La gran aportación de la mencionada investigación es que muestra que la adición de la hipnosis mejora la efectividad a largo plazo del tratamiento en grupo de la fibromialgia mediante la terapia cognitivo conductual (TCC) multicomponente. ¿Es correcto? ¿Qué otras conclusiones aporta la investigación?

Antoni Castel: Los resultados más destacados de nuestro trabajo fueron los siguientes. En primer lugar, que los pacientes con fibromialgia que recibieron medicación y tratamiento cognitivo-conductual (TCC), o bien medicación y TCC complementado con hipnosis, mejoraron significativamente más que los pacientes que sólo recibieron tratamiento farmacológico. Además, se comprobó que estas mejorías se mantuvieron en el largo plazo. En segundo lugar, se constató que añadir hipnosis al TCC de la fibromialgia aumentaba la efectividad de este tratamiento psicológico. Es importante remarcar que añadir hipnosis no aumentó la duración del tratamiento, ni su forma de realización, que en todo momento se efectuó en formato grupal.

Sin embargo, quiero destacar algo que es importante para aquellos psicólogos que no tengan formación en hipnosis. Con independencia de si se aplica hipnosis o no, este trabajo también revela que la TCC multicomponente de la fibromialgia puede ser efectiva y mantener los beneficios terapéuticos si se consideran determinados aspectos de la TCC en el tratamiento de la persona con fibromialgia. En concreto, aspectos como los de la información sobre la enfermedad y los procesos de modulación del dolor, la realización de tareas que faciliten la restructuración cognitiva y modifiquen la forma de reaccionar ante las demandas del entorno, la instauración de un programa TCC que aborde el insomnio crónico, la planificación de objetivos y una técnica de relajación que incida sobre el sistema neurovegetativo pueden ser aspectos a considerar prioritarios en el abordaje terapéutico de la fibromialgia por parte de un psicólogo clínico.

#2. Una de las ventajas que se supone al tratamiento psicológico del dolor y especialmente a la aplicación de la hipnosis a este tratamiento es que disminuye el consumo de analgésicos por parte de los pacientes. En la investigación descrita ¿se obtuvieron medidas del consumo de analgésicos por parte de los participantes? En caso afirmativo, ¿Cómo fue el resultado de esa medida?

A. C.: En este trabajo no se monitorizó el consumo de fármacos. Tal vez hubiese sido interesante hacerlo, pero el número de variables estudiadas ya era elevado. Sin embargo, nuestra percepción, en general y al margen de este estudio en concreto, es que los pacientes tienden a disminuir el consumo de fármacos, especialmente de los rescates analgésicos, cuando realizan un abordaje multidisciplinar de su problema de dolor.

#3. Este tratamiento empleado en el tratamiento del dolor crónico de la fibromialgia ¿es aplicable a otras dolencias y poblaciones?

A. C.: En nuestra Unidad aplico programas TCC grupal a otras patologías de dolor distintas a la fibromialgia. Por ejemplo, a la lumbalgia crónica o al dolor crónico generalizado. El eje de la intervención es bastante similar al realizado en el trabajo publicado en The Journal of Pain, aunque en estas otras patologías, obviamente, la intervención se ajusta a las características del tipo de dolor y a la tipología de los pacientes. Una diferencia importante, sin embargo, es que en estas intervenciones grupales no utilizo la hipnosis como adyuvante del tratamiento psicológico.

El porqué de utilizar la hipnosis como adyuvante en un tipo de intervención grupal y no en otro, vendría dado por el componente central del dolor de fibromialgia. Hay evidencias de que con hipnosis se consiguen importantes mejorías en el tratamiento del dolor central, como por ejemplo, en dolor de miembro fantasma. Posiblemente, esta sea una de las explicaciones del por qué la TCC multicomponente combinada con hipnosis consigue mejores resultados que la TCC multicomponente sin hipnosis al tratar a personas con fibromialgia.

En el tratamiento del dolor agudo la hipnosis clínica ha demostrado ser una buena herramienta. En el tratamiento del dolor en niños, aunque hay menos estudios, sí que sus resultados parecen prometedores, como por ejemplo, en las abdominalgias. Sin embargo, su aplicación debe ajustarse después de haber realizado una adecuada y parsimoniosa evaluación.

#4. Actualmente ¿cómo está la investigación del tratamiento psicológico del dolor? ¿Existen apoyos institucionales o privados? ¿Es necesaria más investigación en este campo? ¿Hacia donde se dirige la investigación?

A. C.: El tratamiento psicológico del dolor crónico es un ámbito que está en efervescencia, tanto aquí como en otros países. Los recursos son limitados y suelen depender de la aprobación de proyectos financiados con fondos públicos. Conseguir fondos es algo difícil para las personas que estamos trabajando en el campo asistencial y viendo pacientes a diario. Sin embargo, existen estructuras públicas que favorecen el trabajo de las personas con vocación investigadora. Nuestro caso es un ejemplo de ello. Coordino el Grupo Multidisciplinar de Investigación en Dolor (GMID) y este grupo está integrado en un Instituto de Investigación que nos proporciona algunas ayudas logísticas. Es evidente que trabajar en un hospital universitario favorece este tipo de iniciativas, ya que existe una cultura al respecto.

La investigación sobre intervención psicológica en dolor crónico es un campo que se ha de desarrollar ampliamente. Es importante diseñar programas dirigidos a patologías específicas y validar sus resultados. También es importante determinar qué funciona y en quién, es decir, poder identificar qué aspectos de un determinado programa son los realmente relevantes y poder identificar a los pacientes que pueden beneficiarse de una determinada intervención psicológica. Además, la intervención del psicólogo debería prevenir la cronificación del dolor, sabiendo más sobre los factores que facilitan la aparición del dolor crónico. Queda mucho por hacer y cada respuesta desvela nuevas preguntas.

#5. Recientemente, el documento «Unidad de tratamiento del dolor Estándares y recomendaciones.» publicado por Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad en su sección de Informes, Estudios e Investigación 2011, incluye la hipnosis en la cartera de servicios de la unidad del dolor y como parte de las funciones y competencias del profesional de la psicología y como una intervención psicológica básica que ha mostrado su eficacia en estudios controlados. En su experiencia, desde atención primaria o desde los profesionales de la salud en general, ¿se recomienda el tratamiento psicológico del dolor y en especial la hipnosis? En caso negativo, ¿Por qué cree que no se recomienda?

A. C.: Creo que aún existe poco conocimiento sobre el rol del psicólogo en el tratamiento del dolor y se nos suelen encasillar en el tratamiento del dolor psicogénico. Sin embargo, la realidad es bien distinta. Por mi consulta pasan enfermos con graves secuelas debidas a accidente, con severos problemas de columna, en silla de ruedas o con lesiones nerviosas y a ninguno de ellos se le etiquetaría de persona con dolor psicológico. La inclusión del psicólogo en las unidades de dolor se debe a que los factores psicológicos juegan un importante papel en la experiencia de dolor, que es a la vez sensorial y emocional. Los profesionales de la salud van conociendo la importancia del psicólogo en el tratamiento del dolor, pero aún falta mucha pedagogía por hacer. Con respecto a la hipnosis, es todavía más complicado. A su desconocimiento hay que sumar los prejuicios que se tienen respecto a ella. Creo que trabajos como el que hemos publicado pueden ayudar a que se tenga una visión más ajustada sobre el potencial de la hipnosis en el tratamiento del dolor crónico.

#6. Y la población en general, ¿cómo reaccionan los pacientes con dolor ante la atención por parte de un profesional de la psicología y en particular ante el uso de la hipnosis cómo técnica para aliviar el sufrimiento?

A. C.: El paciente que es remitido al psicólogo de la Unidad de Dolor suele tener tres miedos: “que piensen que hace cuento”, “que lo suyo es psicológico” o que “se lo quieren quitar de encima”. Debido a ello, mis compañeros médicos ya procuran explicar detalladamente al paciente la derivación al psicólogo y la forma de proceder en las unidades multidisciplinares de tratamiento del dolor crónico. Cuando el paciente entiendo esto, es más fácil iniciar el proceso de evaluación y el posterior tratamiento.

Con respecto a la hipnosis, como desmitificamos su contenido y la enfocamos como una técnica útil que el paciente puede aprender y perfeccionar, suele ser bien aceptada en la mayoría de los casos. Si una persona no lo ve claro, no la utilizamos, aunque hubiese podido ser útil en ese caso concreto.

#7. ¿Cómo es el trabajo de un psicólogo en una Unidad de dolor?

A. C.: Dependerá de las horas de dedicación que tenga el psicólogo. En mi caso, que es de dedicación completa, realizo tareas de evaluación de los pacientes con dolor crónico y sesiones de tratamiento individual o grupal. También desarrollo funciones docentes tanto a alumnos de psicología, como a otros profesionales del ámbito de la salud. Obviamente, participo en las sesiones clínicas del equipo y por el tipo de unidad en que estoy, también realizo investigación aplicada.

#8. ¿Que formación debe tener un psicólogo para trabajar en una unidad de dolor? ¿Y el resto de profesionales?

A. C.: Para trabajar en una unidad del dolor es imprescindible una buena formación en psicología clínica y de la salud. La formación no sólo ha de ser a nivel de contenidos, sino también, de experiencia y entrenamiento en el manejo de situaciones complicadas.
Con respecto a otros profesionales del ámbito de la salud, como médicos y enfermeros, creo importante un buen conocimiento del modelo bio-psico-social de enfermedad, aparte de un mejor conocimiento sobre la labor del psicólogo clínico en el ámbito de la salud en general y del dolor crónico en particular.

Muchas gracias
 

. Castel, A., Pérez, M., Sala, J., Padrol, A., & Rull, M. (2007). Effect of hypnotic suggestion on fibromyalgic pain: Comparison between hypnosis and relaxation. European Journal Of Pain, 11(4), 463-468. doi:10.1016/j.ejpain.2006.06.006

. Castel, A., Cascón, R., Padrol, A., Sala, J., & Rull, M. (2012). Multicomponent cognitive-behavioral group therapy with hypnosis for the treatment of fibromyalgia: Long-term outcome. The Journal Of Pain, 13(3), 255-265. doi:10.1016/j.jpain.2011.11.005